No solo haber disfrutado el conocer una canción que nadie puede perderse, que dice tanto de mi, de la vida, del pasado y de cada ser que haya adivinado el parpadeo de las luces que con indiferencia le han visto volver.
Salvador Lemis, gracias por tu encanto y tu talento compartido, Ale Calderon: por tus risas, por tu humor y por tu bondad, GilGil: por tu música y tu compañerismo, por conectar tus ojos y tu alma al acompañarme en Volver, Iván: por tu amistad, por la invitación que me ha dado estas experiencias maravillosas, por esas noches de Almodóvar, divertidas, desveladas, locas y ahora nostálgicas como VOLVER...
P.D. Gracias a todos los que en algún momento me regalaron una sonrisa tras bambalinas...